El suicidio - Psicologo Córdoba Luis Alonso Echagüe 27/08/2013

El suicidio es la primera causa de muerte violenta en España, casi 3500 anuales, entre 30.000 y 90.000 víctimas realizan un intento al año, de ellas las mujeres lo intentan 3 veces más que los hombres pero los hombres lo consuman 3 veces más que las mujeres. La mayoría de los suicidios están vinculados a enfermedad mental pero ésto no es suficiente ya que el suicidio puede acontecer en alguien equilibrado, sereno que ha tenido, de pronto, una desgracia.
El suicidio es real, existe pero no está presente en el resto de la sociedad. Nueve `personas mueren al día en España por causas suicidas. Los registros no recogen como tal los suicidios encubiertos, es decir, aquellos en forma de accidente de tráfico, ahogados, precipitados… en los que si no existe una nota de despedida u otra evidencia, pasa a considerarse estadísticamente como accidente.
El suicidio es la muerte autoinflingida de manera intencional. Es la salida a una crisis o problema que causa sufrimiento a la persona, que no busca autoagredirse sino una salida a sus dificultades, una posibilidad de escapar, porque no encuentra otra alternativa, porque está desesperada.

CAUSAS DEL SUICIDIO

El suicidio es un acto biológico, psicológico y social. Biológico porque parece que existe un DÉFICIT DE SEROTONINA ( un neurotransmisor ) en la conducta impulsiva, psicológico ya que la DEPRESIÓN, la DESESPERANZA, la IMPOTENCIA son las causas más comunes y social, pues el AISLAMIENTO SOCIAL puede conducir a una persona a autoinflingirse la muerte.

Factores de riesgo del suicidio:

-45 o más años;
-dependencia de alcohol;
-intentos previos de suicidio;
-sexo masculino;
-personas aisladas socialmente y reacias a recibir ayuda;
-episodio depresivo con mayor duración de lo normal;
-pérdida o separación reciente;
-enfermedades físicas, por ejemplo: cáncer;
-desempleo o jubilación;
-personas que no toleran la frustración;
-historia familiar de suicidios;
-personas que comunican que van a suicidarse;
-escasos logros personales.
Hay un 10% de casos en los que no aparecen ningún factor de riesgo por tanto, en estas ocasiones, es muy difícil de predecir.

MITOS DEL SUICIDIO

Existen determinados mitos en la sociedad que en ocasiones adquieren funciones de minimizar los comentarios del individuo o pasar por alto determinadas conductas que nos están conectando con la tristeza o la desesperación de la persona. Algunos de los más importantes son:

– Que el suicida es un enfermo mental incurable.
– Quien quiere suicidarse, acaba haciéndolo.
– El suicidio es una conducta que se hereda.
– El suicidio se produce sin un previo aviso.
– Las personas que manifiestan suicidarse no lo hacen nunca.
– La persona mejora después de su intento autolítico.

TRATAMIENTO DEL SUICIDIO

El suicidio no es una seta, no es algo que aparece bruscamente, no es una decisión impulsiva, es algo que se evalúa durante un tiempo. El suicida suele dar señales de ésto, lo que ocurre en su entorno es que, a veces, lo rechazamos o no nos damos cuenta. La mayoría de las personas que intenta suicidarse van dejando rastros de esta forma de actuar que se muestran desde cambios sutiles en su conducta hasta indicios importantes.
El tratamiento es la prevención. Hay que hablar del suicidio como en su día se habló del sida. el poder hablarlo es el principio de la solución. Los medios de comunicación lo han eliminado por miedo a la imitación pero se ha comprobado que una gran cobertura mediático no dispara dicho efecto. La constante información sobre accidentes de tráfico ha llevado a disminuir éstos, sin embargo, no ha pasado igual con el suicidio a pesar e las 3500 muertes al año. Hay que educar para detectar factores de riesgo y en su caso derivar, a la persona, al profesional que competa.
Entre los objetivo del tratamiento está intentar prevenir el suicidio provocado por la desesperación debido a los síntomas mal controlados. La esperanza está depositada en LA PREVENCIÓN, LA DETECCIÓN PRECOZ DEL SUICIDIO Y EL TRATAMIENTO DE LOS TRASTORNOS MENTALES QUE LOS SUBYACEN.

COMO IDENTIFICAR UN POSIBLE SUICIDIO DESDE LA FAMILIA

-La familia debe de observar esos cambios sutiles o esos rastros que la persona va dejando.
-Muchos manifiestan abiertamente “voy a matarme”, “vosotros estaríais mejor sin mí”. Todas las verbalizaciones acerca del suicidio deben ser consideradas como posibles.
-Atender a los cambios de conducta pues se les suele ver deprimidos, desesperanzados, alterados, comen menos de lo habitual, rehúyen el contacto sexual duermen más o están insomnes.
-Prestar atención a los abandonos, donaciones o regalos de bienes materiales.
-Especial atención a una persona que padezca depresión y refiera que no quiera seguir viviendo, a una persona alcohólica que manifieste estar perdido o una persona con trastorno maniaco-depresivo que comunique que nada le causa placer.
En los ADOLESCENTES es un problema en aumento debido al reflejo de los cambios sociales, la mayor disponibilidad de medios, el incremento de éstos, el abuso de alcohol y otras sustancias, etc
Los factores desencadenantes pueden ser: crisis de identidad, sentimientos de rechazo, miedo a diferenciarse del grupo de iguales, vulnerabilidad a los ambientes hostiles, agresivos.
Los factores que precipitan al suicidio en adolescentes suelen ser conflictos con miembros de la familia o discusiones con su pareja.
Pero el detonante puede ser cualquier acontecimiento como estrés, divorcio de padres, pérdida de un ser querido, expectativas de triunfo, etc
Es necesario que los padres hablen, pregunten directamente a sus hijos sobre estos temas por que en la mayoría de las ocasiones desconocen su existencia.

¿Cómo sobrevivir a un suicidio?

El suicidio de una persona es a la vez principio, para los que sobreviven, y final, para el que fallece. La familia de la persona suicidada necesita ayuda durante este periodo de duelo. Acudir a psicoterapia les dará la posibilidad de hablar de sus sentimientos y les proporcionará alternativas para enfrentar esta situación. El suicidio pude hacer que la pérdida de un ser querido sea más dura que la muerte natural. La culpa, el qué podría haber hecho para evitarlo, la vergüenza, la ira, serán patrones de reacción de algunos miembros de la familia. SE PUEDE Y SE DEBE SEGUIR CAMINANDO A PESAR DE LA PÉRDIDA. VOLVER A EMPEZAR ES DIFÍCIL, PERO ES IMPRESCINDIBLE, SOBRE TODO CUANDO PARECE QUE TODO ESTÁ ACABADO.